Estoy convencido de que la frase más hermosa escrita por Lutero fue la tesis número 28 presentada en la Disputa de Heidelberg, en 1518 (donde Lutero profundizó y afiló el mensaje de sus célebres noventa y cinco tesis publicadas el año anterior).
La tesis 28 de Heidelberg resume en gran parte la manera en que la Reforma Protestante (que celebramos hoy) nos ayudó a volver a las Escrituras para entender cómo Dios nos revela Su amor en el evangelio. Esta es la frase:
El amor de Dios no encuentra, sino que crea, lo que le agrada. El amor del hombre llega a existir a través de lo que le agrada.
¿Qué significa exactamente? En las tesis anteriores, Lutero argumenta que nuestra justificación delante de Dios es únicamente por medio de la fe, no por nuestra obediencia a la ley, y también argumenta que somos pasivos en la forma en que alcanzamos la salvación. Ahora, en esta frase ya citada, Lutero va al corazón del asunto y explica la diferencia entre el amor divino y el amor humano.