
“Pues Dios hizo que Cristo, quien nunca pecó, fuera la ofrenda por nuestro pecado, para que nosotros pudiéramos estar en una relación correcta con Dios por medio de Cristo” (2 Corintios 5:21)
Un día como hoy Jesús entregó su vida en la cruz…
Hoy pienso que una oración que todo cristiano hace se puede parafrasear de esta manera: “Padre, enciende mi mente para entender más lo que pasó en la crucifixión”.
Y es que en la cruz sucedió más que lo que podemos imaginar o pensar. La cruz no solamente es el acto de amor más grande jamás hecho (Juan 3:16). La crucifixión de Jesús define qué es el amor:
“En esto consiste el amor verdadero: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a nosotros y envió a su Hijo como sacrificio para quitar nuestros pecados” (1 Juan 4:10)






