30 preguntas al preparar un sermón

Aunque por la gracia de Dios puedo servir predicando en mi iglesia local y otros lugares, tengo demasiado por aprender sobre predicación. Por favor no me mires como una especie de autoridad en este tema. ¡Estoy muy lejos de eso!

Las siguientes preguntas, recopiladas estudiando sobre predicación, han resultado extremadamente útiles, ya que me han servido para examinar la preparación de mis sermones.

Algunas son paráfrasis o tomadas de libros que he leído^[1]Estoy en deuda con las 10 preguntas que sugiere Tim Challies, el apéndice de David Helm en su excelente libro sobre predicación expositiva (gratis en PDF), y ciertas interrogantes que plantea … Continue reading. Otras escritas por mí, pero profundamente basadas en lo que voy aprendiendo de varios autores y predicadores^[2]Entre los libros que hasta ahora me han sido más útiles, se encuentran Iglesia Centrada (Tim Keller) y La Supremacía de Dios en la Predicación (John Piper)..

Espero que te sirvan tanto como a mí.

1. ¿He orado por mí, la iglesia y los no creyentes que oirán el sermón?

2. ¿He estudiado el texto en su contexto en la gran historia de la redención?

3. ¿He estudiado el texto en su contexto literario inmediato?

4. ¿De qué manera el texto anticipa o se relaciona con el evangelio y testifica de Cristo? En otras palabras, ¿cómo la teología bíblica y la teología sistemática me ayudan a ver el evangelio en el texto?

5. ¿Cuál es el propósito del libro en donde se encuentra el texto que predicaré y cómo eso debe moldear mi predicación en el ahora?

6. ¿Cuál era la intención del autor para el texto específico que expondré, en relación a su audiencia original, y cuál es la aplicación correcta para nosotros a la luz del evangelio?

7. ¿La aplicación que explicaré es la principal aplicación del texto, o simplemente una de las posibles?

8. ¿El sermón refleja la forma, la estructura y el énfasis del pasaje bíblico, o estoy cayendo en el error de tratar de amoldar el texto a una estructura ideada por mí o alguien más?

9. ¿La forma en la que el sermón se desenvuelve está presentada de una manera coherente y fácil de seguir por los oyentes?

10. ¿Los términos teológicos que se mencionarán en el sermón han sido explicados de forma natural, breve y sencilla?

11. ¿Puedo decir en una sola frase cuál es el punto general del sermón?

12. ¿Cuáles son las objeciones más comunes (en la cultura que me rodea) al mensaje del sermón y cómo puedo abordarlas brevemente antes de que puedan aparecer en la mente de mis oyentes, de forma natural sin hacer de ellas el punto central?

13. ¿Cuáles son las ideas, presuposiciones o doctrinas que la mayoría de las personas que me oirán ya sostienen (estén conscientes o no), y que deberían conducirlas lógicamente a creer el mensaje del sermón? ¿Cómo puedo aprovechar esto para ser bíblicamente más persuasivo?

14. ¿Cada punto dentro del sermón contará con al menos una ilustración sencilla que resalte apropiadamente la verdad bíblica y ayude al oyente a comprender mejor la exposición?

15. ¿He incluido algunas frases sintéticas que ayuden a las personas a recordar el sermón?

16. ¿El tiempo estimado del sermón está alrededor de 45-50 minutos?

17. ¿El sermón es demasiado intelectual, o puede ser escuchado bien y comprendido por todas las personas que lo oirán?

18. ¿El sermón tiene la sencillez apropiada, o lo he simplificado demasiado cometiendo el error de fomentar alguna clase de anti-intelectualismo?

19. ¿He trabajado en una introducción que impulse expectativas apropiadas y ayude a las personas a prestar atención a lo que expondré?

20. ¿Estoy tan familiarizado con el sermón que podría exponerlo sin un manuscrito o bosquejo? (Aunque de igual forma lo predicaré con un bosquejo a fin de no desviarme y ser preciso en mis palabras).

21. ¿Puedes explicar cómo el texto del sermón habla de maneras concretas a los creyentes y a los no creyentes?

22. ¿Cómo el sermón exhorta y consuela a personas de todas las edades y en distintas circunstancias?

23. ¿He verificado que nada de lo que diré contradiga realmente una o varias verdades bíblicas enseñadas en otros lugares en la Palabra?

24. ¿Hay algo que pueda ser removido del sermón para mayor claridad, menos agotamiento y evitar saturación de información?

25. ¿Cristo y Su obra son el centro de este sermón, o en el proceso me he desviado haciendo que otra cosa sea el centro del mensaje?

26. ¿El sermón contiene de forma fluida un llamado compasivo al arrepentimiento y a la fe en Cristo?

27. ¿Cómo el texto que expondré debe hacerme sentir ante la santidad de Dios y la seriedad de la predicación, a la hora de pararme en el púlpito?

28. ¿He meditado en lo que oraré desde el púlpito públicamente antes y después del sermón, tomando en cuenta el mensaje del texto y que tales oraciones en cierto sentido son parte de la predicación?

29. ¿He predicado este sermón a mi propio corazón antes de pretender predicarlo a alguien más?

30. ¿Estoy confiando en última instancia en mis dones, mis estudios y la preparación del sermón, o descansando en el poder de Dios para la predicación de Su Palabra y la efectividad de la misma?

Hermanos, la predicación es un asunto serio (2 Timoteo 4:1). Al preparar una predicación, te animo a hacerte preguntas como estas en oración, y atender diligentemente las fallas que encuentres.

Que el Señor nos conceda siempre predicar Su Palabra con fidelidad, de manera que la gente no fije su mirada en nosotros, sino en el Cristo al que proclamamos. Sólo a Él sea la gloria.