Crecer es fácil. Lo difícil es dejar de ver dibujos animados… y yo soy fan de Phineas y Ferb.
Hoy quiero compartir 3 lecciones que puedes aprender de Phineas y Ferb. Estas lecciones pueden motivarte a hacer una diferencia tremenda en tu servicio en la iglesia y en lo que haces día a día.
¿Me acompañas?
Lección 1: No necesitas tener mucha edad para hacer cosas grandes.
En muchas ocasiones, alguna persona adulta le pregunta a Phineas y Ferb lo siguiente: “¿No son muy jóvenes para hacer lo que hacen?”. Ellos responden: “Sí, lo somos”. Luego siguen trabajando en lo suyo.
LOVE IT.
El apóstol Pablo escribió a su discípulo Timoteo lo siguiente:
“Ninguno tenga en poco tu juventud, sino sé ejemplo de los creyentes en palabra, conducta, amor, espíritu, fe y pureza.” (1 Timoteo 4:12)
Aunque muchos jóvenes dicen ser cristianos, pareciera que muchos no fueran valientes para hacer lo que deben hacer hoy. ¿Te imaginas si toda esta generación de jóvenes que profesan su fe en Jesús, hiciera lo que tiene que hacer sin importar si la gente, incluso gente de la iglesia, los critique por su edad?
BOOM! Eso sería fabuloso.
La verdad es que ya tienes permiso para hacer lo que Dios quiere hagas. No le des importancia a las críticas que buscan simplemente criticarte en vez de ayudarte.
Lección 2: Las cosas grandes empiezan cuando dejas de pensar solo en ti.
Phineas y Ferb son muy generosos. Nunca buscan lo suyo ni se preocupan por la reputación. Tampoco se preocupan por hacer dinero con lo que hacen. Solo les interesa pasarla bien, compartir con sus amigos y realizar algo útil para todos, incluso para las personas que a veces buscan sabotear sus planes (como Candace, por ejemplo).
Sé generoso. Busca ser útil y aplicar los dones y talentos que Dios te ha dado.
La vida en esta tierra es corta, y en cualquier momento veremos a Jesús cara a cara. ¿Qué crees que te dirá Jesús? ¿”Buen siervo fiel, en lo poco fuiste fiel y en lo mucho te pondré”? ¿O te llamará mal siervo y te apartará de Él porque no hiciste lo que tenías que hacer?
Las cosas grandes empiezan cuando dejas de pensar solo en ti y empiezas a tratar a los demás como quieres que te traten. Jesús enseñó que en eso se resume mucho de lo que Dios quiere que hagas.
Lección 3: La vida no la disfrutan las personas que se rinden ante cualquier adversidad.
Siempre les pasa algo a los inventos de Phineas y Ferb. Desaparecen y se va a un lado todo el esfuerzo que ellos dedicaron en crear algo.
Sin embargo, ellos nunca se rinden.
Ellos siguen creando. Ellos siguen intentándolo de nuevo. Ellos siempre ven lo bueno en las situaciones malas.
El mundo necesita que los cristianos seamos así. De hecho, Dios quiere que seamos así. Dios anhela que nunca nos rindamos ante una circunstancia que pueda levantarse en nuestra contra.
Atrévete a disfrutar tu vida dejando el pasado atrás y continuando haciendo lo que naciste para hacer.
:)