Últimamente he estado pensado en aquel pasaje de la Biblia que dice “Y el mundo pasa, y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre” (1 Juan 2:17).
Ese breve pasaje habla de muchas cosas, y entre esas cosas, habla de modas.
Hoy en día está pasado de moda honrar a nuestros padres, ser trabajadores, hablar sin usar malas palabras. Es anticuado procurar llegar vírgenes al matrimonio. Es “aburrido” no gastar dinero en licor y en drogas. Es de “losers” ser buenos estudiantes, ahorradores y tener buenos modales.
En mi generación la moda es ser vulgar, vanidoso, superficial, mentiroso, rebelde sin causa y buscar ser popular cueste lo que cueste (normalmente, suele costar la dignidad y el respeto). Es común ver a «cristianos» actuar como huérfanos en Facebook. También es la moda burlarse de las cosas de Dios y vivir un cristianismo falso.
Hay personas que viven para los aplausos, cuando en realidad los aplausos son las cosas más efímeras que existen. Hay personas que viven más pendientes de lo que piensa la gente de ellas que de lo que piensa Dios. Hay personas que viven más enfocadas en las cosas pasajeras que en las cosas que realmente valen la pena.
Veo a chicas siendo alocadas para ser sexys y estar a la moda, para sentirse amadas, cuando en realidad lo que necesitan es ser ellas mismas con el amor de Dios en sus corazones (Lee lo que toda chica necesita saber). Veo a jóvenes que buscan ser geniales siguiendo las tendencias de este mundo, cuando en realidad lo que necesitan es seguir a Jesús y ser libres de la esclavitud de las masas (Lee lo que todo hombre necesita saber).
Cuando veo lo que hoy es moda, y lo contrasto con lo que quedará para siempre, me doy cuenta de que lo que la Biblia me llama a hacer es mejor que estar a la moda.
El mundo te dará la espalda porque es hipócrita. Las cosas en esta tierra son pasajeras. Un día serás genial para muchos, y al otro día te tratarán como si fueras idiota. Un día algunas personas te aplauden por tu rebeldía y aparente originalidad, y al otro día la gente te dan la espalda cuando empieces a afrontar en este mundo las consecuencias de tus actos en pos de estar a la moda y no ser un marginado.
Mucha gente te criticara si decides vivir como Dios quiere que vivas, pero hacer la voluntad Él es mejor que estar a la moda. No importa si te llaman anticuado o se burlan de ti, la opinión de Dios es lo que en verdad vale.
Con el tiempo tal vez aprenderás cosas como que ser fiel no es una estupidez. Que honrar a tus padres no es una mala idea. Que no necesitas actuar como el mundo espera que actúes para realmente vivir tu vida.
La pregunta es: ¿Lo aprenderás por causa de tus errores? ¿O porque tomaste buenas decisiones y viste que valieron la pena?
No quiero que seas de las personas que aprenden de sus errores cuando pudieron habérselos ahorrado y haber aprendido de la mejor manera: Haciendo las cosas bien.
Hacer la voluntad de Dios es mejor que estar a la moda.