Las personas a veces me veían como un tipo raro cuando me preguntaban si había visto alguna serie en Netflix y yo les respondía que no tenía cuenta en Netflix. Nunca tuve interés por las plataformas de streaming… hasta que llegó la pandemia.
Mes y medio después de estar encerrados en casa, mi esposa y yo decidimos darle una oportunidad a Netflix para ver qué tan bueno podía ser. (Los nerds nos cansamos de estudiar y a veces necesitamos entretenernos de otras maneras).
Tan pronto empezamos a navegar en Netflix, nos dimos cuenta de que allí hay contenido bueno para disfrutar en familia. Pero, siendo honestos, también hay demasiadas cosas que un cristiano no debería ver si quiere tomar su santidad en serio. Ahora entiendo mejor por qué muchos creyentes nos preguntamos si deberíamos cancelar Netflix.
El lado oscuro de Netflix
“Netflix tiene una obsesión con el sexo y la violencia”, me dijo un amigo pastor hace años. Y vaya que parece verdad. Muchas de las series más promocionadas en la plataforma están llenas de eso y buscan normalizar pecados como el sexo fuera del matrimonio y la homosexualidad, entre otros. Además hay contenido muy sangriento y macabro que puede perturbarnos o insensibilizarnos a la violencia a nuestro alrededor. También es posible hallar contenido que se burla de la fe cristiana.